Feria de Muestras de Asturias - HISTORIA GRÁFICA (1924-2016)
65 64 una identidad para Asturias: la Feria Internacional de Muestras Asturiana y « Asturias, Turismo Natural » 1.2 estaba clara. Los recursos publicitarios debían intensificarse en los focos de interés de la economía asturiana, así como en las regiones desde las que la comunicación con Asturias fuese factible. Además de confiar en la propagación de la experiencia positiva de los expositores de la primera edición, muchos de los cuales confir- maron su participación en la segunda antes de acabar el certamen, se nombraron delegados de la Feria en distintas ciudades y naciones extranjeras, encargados de dar conferencias sobre la situación industrial y comercial de Asturias y su poten- cial como nuevo mercado. Los visitantes se debían captar sin embargo aunando la visión industrial de Asturias con las maravillas naturales que ofrecía y la costa gijonesa, y de este modo se insertaron artículos en diarios nacionales, muchos de ellos escritos por Joaquín Bonet, que ahondaban en la visión turística de Asturias y en la fortaleza de sus empresas. Además, sabemos que en ese año se colocaron carteles de la Feria en la Puerta del Sol y en la calle Alcalá de Madrid. En abril de 1925 comenzó la propaganda gráfica con la impresión de un programa que incluía artísticos fotogramas y, ese mismo mes, se expuso en los escaparates de Casa Masaveu una obra para cartel de la Feria encargada al joven artista Germán Horacio 9 . A nivel visual, los carteles debían representar la iden- tidad de la Feria y elaborar un mensaje claro sin perder su valor artístico, y parece que la obra de Germán Horacio obtuvo un acogida muy positiva. Fueron muchas las alabanzas que recibió en prensa: El Noroeste 10 destacó la fuerza del colo- rido, elemento esencial del cartel en detrimento del detalle; La Prensa 11 describió la imagen como un resumen del hispano-americanismo. En el mes de mayo ya se había estampado en la imprenta Artes Gráficas y empezaba a difundirse ese primer cartel, a la vez que se mostraba de nuevo en Casa Masaveu un segundo boceto del artista, de dimensiones más pequeñas, destacando el aspecto turís- tico del certamen. La cifra de carteles impresos fue de 2000 carteles grandes, 3000 pequeños y 65.000 postales. Fortaleciendo ese aspecto, la Feria de Mues- tras Asturiana editó ese mismo año la película Asturias , que se proyectó en los cines Robledo durante el certamen y que el príncipe de Asturias pidió se proyec- tase meses después en el Palacio Real. El turismo tuvo su especial importancia en la edición de 1926 con la presenta- ción del Museo del Turismo, creado en colaboración con todos los comités locales, coordinados por el Instituto del Turismo. Este apoyo de la Feria a la promoción turística de Asturias y a la difusión de una manera popular y directa de la infor- mación le valió los halagos de la prensa, que destacó también la utilización de la fuerza natural de la región, lejos de la representación costumbrista de mozos y mozas alejada de la imagen actual de Asturias y sus habitantes, que llevaba a equívoco al visitante 12 . La propaganda estrictamente dedicada a la Feria está representada por dos carteles de los que se conservan dos postales, en las que existe de nuevo esa dualidad entre la imagen alegórica del comercio –protagonizada por Mercurio– con 9 Sabemos que se trata de un encargo al recogerlo de esa manera el diario La Prensa , Gijón, domingo 12 de abril de 1925, año V, n.º 1178, pág. 1. 10 El Noroeste , Gijón, 16 de abril de 1925, año XXIX, n.º 10.201, pág. 5. 11 La Prensa , Gijón, viernes 17 de abril de 1925, año V, n.º 1182, pág. 5. 12 El Noroeste , Gijón, martes 17 de agosto de 1926, año XXX, n.º 10.616, pág. 1. un paisaje evocador de las montañas asturianas. Ambas imágenes están firmadas por Zubillaga, un joven dibujante que en el mes de mayo había realizado una expo- sición de obras sobre cartulina en el Ateneo Obrero de Gijón, caracterizadas por paisajes «idealistas» 13 . La obra con la imagen de Mercurio apareció recogida en el diario La Prensa el 26 de agosto de 1926, siendo el primer cartel de la Feria que se reproducía en prensa. El diario El Noroeste , sin embargo, ilustró la inaugura- ción de la Feria de Muestras con un dibujo realizado para su especial por Nicanor Piñole (ver pág. 62), en cuyo pie puede leerse «…belleza y trabajo. He aquí los dos elementos en que funda Asturias su prosperidad, que hoy se manifiesta en la III Feria de Muestras». Ese mismo diario reclamó un concurso entre artistas regionales para la selec- ción del cartel anunciador de la edición de 1927, que se distribuyese por todo el país, si bien el Comité Organizador ya había realizado el encargo al ilustrador Rafael Penagos. Penagos era uno de los cartelistas de mayor fama en España, que partiendo de una estética modernista introdujo la ilustración art déco . Al ser una firma reconocida y admirada, se esperaba una mayor difusión de cartel grande y del mediano que había realizado, a la vez que se ensalzaba su capacidad para captar y representar la esencia asturiana en sus dibujos. Durante la Feria de ese año pudo verse una exposición de carteles de Germán Horacio que causó gran interés y de quien se destacó la inclusión con gran acierto en su obra de las nuevas corrientes artísticas, a la vez que la sutil ironía de muchos de sus carteles. 13 El Noroeste , Gijón, domingo 30 de mayo de 1926, año XXX, n.º 10.552, pág. 3. Paipái obsequio de la II Feria de Muestras Asturiana, conservado en el Muséu del Pueblu d’Asturies. Sobres anunciadores de la II Feria de Muestras, denominados como propaganda práctica y publicados en Gijón veraniego en 1925.
RkJQdWJsaXNoZXIy NzU1NzQ=