La Guardia Civil de Gijón y su ámbito geográfico celebró un año más la festividad de su patrona, la Virgen del Pilar, en el Recinto Ferial de Asturias Luis Adaro. Una ofrenda a los agentes fallecidos en acto de servicio y una veintena de reconocimientos constituyeron el grueso de actos que tuvieron lugar en el Pabellón 1 del espacio ferial.

En el acto estuvieron presentes la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón; la viceconsejera de Justicia del Principado, Encarnación Vicente; la secretaria general de la Delegación del Gobierno, Andrea Pavón; y el presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, Félix Baragaño. La máxima autoridad de la Guardia Civil fue el teniente coronel Rubén Flores, quien destacó la capacidad de la Benemérita “para, manteniendo la tradición, saber adaptarse a los nuevos tiempos.”

El acto de este año sirvió como homenaje a la primera generación de matronas que trabajaron en Gijón, "un embrión que facilitó la presencia de mujeres en el cuerpo", aseguró Flores. Entre la veintena de personas y guardias civiles que recibieron distintas medallas y distinciones, el ex director comercial de ferias y congresos de la Cámara de Comercio de Gijón, Mario Cueto, fue honrado con la entrega de una placa “por su apoyo desinteresado” a la Guardia Civil de Gijón.